21/9/12

Doctor Zhivago I

Desde que escuché lo de la entrada en Mercadona he estado pensando en leerme un libro, Doctor Zhivago. Y todo porque hay una imagen de la película que me recordó a lo de los "Robbin Hoodnes de Marinaleda" : Es aquella en que Zhivago vuelve a su casa en Moscu tras regresar del frente. Al llegar a su mansión entra por la puerta y se encuentra con gente dentro de la casa, gente desconocida para él. Al paso le salen su mujer, Tonia y su suegro y le dicen que en la casa está viviendo mas gente. No le da tiempo a preguntar el motivo cuando un hombre se acerca a él y le explica que la casa era muy grande para ellos y que están viviendo otros camaradas. Zhivago le mira y queriendo responder el otro se le adelanta pidiendo su "permiso" como "camarada" y sin que haya "problemas". Fin de la conversación.
Pues eso trasladado al Mercadona en el 2012 podría ser algo parecido. Solo que en el libro no es así como ocurre, sino que al llegar, Tonia le comenta a su marido que han cedido parte de la casa a los del sindicato y que van a ceder otras habitciones porque ha pensado que ellos con solamente ocupar tres estarán bien. Otra perspectiva que a Hollywood no le gustó tanto.
A Boris Pasternak lo enfilaron un poco en Rusia ya que el libro daba una imagen muy real de lo que la revolución bolchevique había sido y lo que ocurría a pie de calle y claro, a uno no el gusta que le cantes sus miserias. Zhivago, se quedó a trabajar en el hospital público, cuando lo nacionalizaron. Mientras la mayoría de sus compañeros  fueron a ganarse el pan a otros sitios, él se quedó a mantener una sanidad pública a costa de su tiempo, sus lomos y su familia, pues estaban muertos de hambre y de frío por la miseria a la que se les había llevabo. Ahora bien, Zhivago estaba contento porque era su deber. Estoy por la parte del libro donde Zhivago se muda al campo, a ganarse el pan porque en Moscú ya no sólo les queda hundirse mas y mas en la nieve.

23/2/10

16 octubre del 2009



Lugar: Teatro de la Ciudad de Méjico D.F.

Mónica Naranjo actúa dentro de su gira Adagio junto con la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de Méjico. Un par de meses después publica este concierto en formato DVD y CD.
Llevaba tiempo sin escuchar algo que me enganchase tanto y no me imaginé que este CD lo hiciese. Primero porque a mi Mónica Naranjo me gusta lo justo, es decir, alguna canción y en algún momento. Y segundo porque la idea de música pop y discotequera acompañada por la Filarmónica no me cuadraba (y eso que ya Metállica marcó un antecedente).
Pero perdí la oportunidad de verla en Sevilla en Junio del año pasado y quien pudo ir al concierto vino fascinado, emocionado, sorprendido...envidia que tengo desde entonces.
He tardado en escucharlo y cuando lo he hecho he querido volver a hacerlo con el volumen alto, despacio y deteniéndome a escuchar cada arreglo, cada voz, cada coro...Impresionante.
El proyecto de Adagio es una locura personal, como dice en alguna entrevista la cantante, una locura que muestra lo bien que se sabe expresar, la voz tan matizada que posee, la emoción que quiere transmitir. Mónica Naranjo es una artista, y no solo porque se sabe vender muy bien; rentabiliza su imagen, el papel de diva que representa públicamente, el movimiento de masas que genera; sino porque a hecho un álbum donde guía al oyente a través de una camino musical, de sensaciones auditivas y visuales, le dice cuando tiene que estar mas atento, cuando esperar, cuando aplaudir, no respirar, en definitiva, conduce a cada espectador por una historia musical, la suya. Nuevos arreglos, nuevos ritmos, voces....un recuerdo a los arreglos para Moulin Rouge en algunos tramos, el principio por ejemplo.
Se nota que Mónica Naranjo tiene ganas de sorprender al público, de buscarle las vueltas a lo que hace y no sumar una canción tras otra y aquí lo demuestra. Pero después de escuchar este álbum pienso que todavía tiene mas que hacer, que está en un punto de una salto cualitativo, ese punto donde es difícil superarse pero uno tiene la certeza de que puede hacerlo mejor, puede rebuscar y rebuscar y mostrar algo mas de si mismo.
El tiempo que dura el concierto está rebosante de matices, que invitan a escucharlo varias veces porque una piensa que se pierde gran parte de lo que oye, lo cual es verdad.
Les invito a que lo escuchen con tiempo, dejándose llevar por el ritmo que impone y olvidando los cds anteriores.